Hide fotográfico casero "Cuatro Costuras"

Atención: Hay un artículo posterior con mejoras importantes para la construcción del hide.

Esto es lo que he hecho para construirme un Hide o escondite para fotografiar fauna de una forma barata y casera. Es un hide de tipo iglú con varillas de fibra de vidrio desmontables y planta cuadrada. Supongo que hay muchas otras formas de hacerlo, pero esta me resultó barata, simple y rápida (son literalmente 4 costuras), y por ahora está siendo la mar de eficaz.

El Esquema
Lo primero que debemos hacer es decidir las dimensiones de la base. Yo decidí hacerla cuadrada de 125 cms de lado. Cuanto más pequeño, más eficaz será, pero a la vez más incómodo. Creo que 125 cms es en mi caso una buena medida, pero lo mejor es que lo pruebes antes (luego explico cómo), para que encaje con el tamaño de tus piernas, de tu silla y de tu estatura (aunque la altura la decidiremos luego).

La Estructura

Vamos con la estructura de varillas. He usado varillas de fibra de vidrio hueca de 6mm, de las usadas para cometas. La venden en Decathlon en tramos de 120cm. Yo he necesitado 5 varillas y he cortado cada varilla en 2 tramos.

Las uniones entre las varillas las hice con tubo metálico de latón, de 6mm de diámetro interior. Lo encuentras en algunas tiendas de maquetas. Vale cualquier tubo metálico resistente, no necesariamente latón. Cortamos trozos de 10 cms (que irán rellenos de 5cms de varilla por cada lado). Hacen falta 8 trozos de tubo. Fijamos cada trozo de tubo a un tramo de varilla, dejando 2 tramos de varilla sin tubo (serán los tramos centrales). Yo fijé los tubos a las varillas con cinta americana, pero vale cualquier cosa ya que no soportan fuerzas de tracción.

Las uniones de la tela a los extremos de las varillas las haremos con alambre fuerte y cordón. Cortamos un trozo de alambre de unos 10 cms y lo doblamos en forma de “U” bastante cerrada. Uno de los lados de la “U” irá metido por dentro de la varilla (se debe poder meter y sacar) y en el otro lado hacemos un bucle cerrado donde irá atado el cordón. Necesitaremos 4 piezas como esta.

Así es como queda cada una de las patas, con el alambre por dentro y el cordón que va cosido a la tela y que la mantiene tensa:

Cómo comprobar las medidas
Ahora que ya tenemos todas las piezas de la estructura, hay que montarla para probar las medidas. Para ello haremos un cuadrado con un cordón fino, que tendrá las dimensiones de la base. En cada esquina del cuadrado atamos una de las piezas de alambre por el bucle, para poder meter el otro lado ldentro de las varillas. Unimos las varillas de forma que formen dos piezas de 5 tramos (o sea, tal como van a ir montadas), y las montamos cruzadas encajándolas en los alambres de las esquinas. Atamos entre sí las dos varillas por su punto central (lo más alto) para que no se muevan y ya podemos probar si nos vale o no. En realidad lo que hemos hecho ha sido montarlo sin la tela.

Para probar las medidas y sobre todo la altura, lo mejor es montar la estructura como hemos explicado y poner dentro la silla que usaremos, sentarnos en ella y montar el trípode donde nos caiga cómodo. Yo usé una silla de camping con respaldo, la más baja que encontré (unos 20 cms del culo al suelo). También creo que he acertado con esto. Mucho más baja sería incómoda y en suelo húmedo te mojarías. Sin respaldo sería insufrible después de un par de horas, y más alta sería demasiado aparatosa para transportarla.

Esta es la silla con las varillas terminadas:

Yo he dejado más o menos un palmo entre mi cabeza y el techo, y también creo que está bien. Si lo queremos más alto, añadimos otro tramo a cada varilla y volvemos a probar. Si lo queremos más bajo, podemos cortar un poco el tramo central de cada varilla.

Una vez que ya tengamos la estructura a nuestro gusto (esto se tarda mucho en explicar pero se hace muy fácilmente), vamos con la tela.

La tela

Al igual que creo que he acertado en algunas cosas, en la tela me he equivocado. He usado “loneta” marrón (es la que más fácilmente pude encontrar). El problema no es que sea marrón, sino que es demasiado débil y se transparenta. A mí no me lo pareció cuando la miré en la tienda, pero no es lo mismo mirarla contra una bombilla que contra el sol, y recordad que generalmente trataremos de tener el sol a nuestra espalda y por tanto los bichos nos verán a contraluz. Al menos la tela de la pared trasera debe ser totalmente opaca, o tan opaca como se pueda. Lo ideal es que todas las paredes sean opacas, ya que el hide será más eficaz cuanto más oscuro sea su interior. Yo acabaré rehaciéndolo con otra tela.

Una vez que tenemos decidida la tela (insisto en que es mucho más importante que sea opaca que que tenga dibujos de camuflaje), necesitamos saber como cortarla para coserla.

Cortar la tela
Básicamente vamos a coser 4 caras iguales, más o menos triangulares (no exactamente, ahora lo vemos). La forma del lateral es un triángulo "engordado". Es una buena idea dibujar con tiza uno de estos triángulos en la propia tela.

La base del triángulo debe medir lo mismo que la base del hide, lógicamente (AB=BC=CD=DA). Y cada uno de los dos lados restantes debe medir la mitad de lo que mida cada una de las varillas montadas (también lógicamente, AE=BE=CE=DE). Pero esto nos daría un hide con forma de pirámide y no es eso lo que queremos, y por eso tenemos que “deformar” los lados (no la base) para que se unan arriba formando un ángulo recto, sin variar las dimensiones de los lados.

Podemos ayudarnos de las varillas para trazar la curva, que tampoco es tan crítica. Lo importante es que los laterales (que no son rectos) midan la mitad que las varillas, y que estos laterales se unan entre sí formando un ángulo recto. Dentro de esto, trataremos de que la curva sea lo más progresiva posible.

Dejar espacio para coser...
Una vez tengamos uno de los triángulos dibujado, cortaremos 4 iguales pero “agrandándolos” unos 5 cms hacia cada lado (para la costura), y unos 20 hacia abajo (para dejar un faldón que se adapte a las irregularidades del suelo). Recordad que la costura debe ir por la línea dibujada, no por el corte...

Las 4 Costuras
Y ahora vienen las famosas 4 costuras: Cosemos a máquina y con hilo fuerte desde la base (no desde el faldón, que queda suelto) hasta unos 20 cms del vértice del techo. No cosemos hasta arriba para poder abrir y cerrar el techo para ventilar (dentro puede hacer a veces MUCHO calor).

Como veis, no es nada crítico que ni las costuras ni los cortes sean muy elegantes...

Una vez cosidos así los 4 lados, unimos dos lados opuestos en el centro, para que quede como en la foto (donde parece que está atado, en realidad está cosido). Así podremos abrir y cerrar el techo (por el calor). En esta foto se ve también el margen que hemos dado para la costura (los famosos 5 cms), que nos vendrán muy bien para cerrar después.

Los cordones
A unos 20 cms del principio de cada costura (casi abajo del todo), y también en el centro de cada costura, coseremos (después, y usando hilo fuerte) unos trozos de cordón de unos 40 cms, para atar a las varillas y que no se mueva todo. También coseremos un cordón igual en el centro (arriba). Se ve en la foto.

No haremos puerta, ya que para entrar y salir lo que haremos será levantarlo del suelo (no va clavado ni tiene suelo). Esto parece un engorro, pero realmente de un hide sólo hay que entrar y salir una vez en cada sesión, así que no es para tanto.

Aquí se ve bastante bien el faldón, que dejamos sin coser por los lados para que arrastre sobre el suelo.

Una vez montado (sin ventanas por ahora) deberá quedar algo como la imagen de arriba. No es muy importante que la tela quede totalmente sin pliegues, pero sí que quede tensa, para que no se mueva con la menor brisa. Podemos ajustar con los cordones de las esquinas hasta dejarla tensa sin forzar la tela.

Las Ventanas
Ahora montaremos la silla y el trípode dentro, nos sentamos cómodamente y entonces es cuando cortamos la ventana frontal. No pasa nada si la hacemos demasiado baja, siempre podemos llevar las tijeras a la primera sesión y cortar más hacia arriba. Tened en cuenta que no siempre lo montaréis en terreno tan horizontal. Si os sirve mi experiencia, creo que yo la hice demasiado ancha, pero tampoco es grave. Las ventanas laterales lo mejor es hacerlas con unas tijeras en la primera sesión, donde veamos que hacen falta (sólo sirven para ver lo que pasa alrededor). No conviene hacer ventana trasera, ya que entrará luz por ella y nos delatará. La ventana delantera la suejtamos pillándola con las barras de la estructura desde dentro, cuando montemos la cámara y así podemos bajarla un poco o abrirla del todo. También uso a veces para esto pinzas de tender.

La malla, ver sin ser visto
Una vez en el campo, echamos por encima una tela de malla de camuflaje (de esas que son casi transparentes) que cubra las 3 ventanas y que cubrirá también el objetivo.

Y encima de todo esto echamos una red de camuflaje, que queda como en la foto. El objetivo lo sacamos por un hueco en la unión de los laterales de la red, y así no tenemos que romperla por ningún lado.

La red que yo he usado no es propiamente una red, es una tela fina de nylon que viene cortada y que se vende por metros. La compré en una tienda de caza. Para adaptarla, simplemente la doblé y le hice un par de nudos en un lateral. En realidad la forma que queda es como de cucurucho (el vértice va arriba), pero como es muy blanda se adapta bien. En la imagen se ve que sobra por algunos sitios. Otra de las ventajas de esta tela es que pesa muy poco.

Como sacar el objetivo
Nos queda la forma de sacar el objetivo, a la que también he dado bastantes vueltas porque me ha dado problemas. Mi teleobjetivo es de enfoque manual, por lo que necesito sacar también la mano y moverla casi contínuamente. La malla de camuflaje se transparentaba y me veían mover la mano, así que lo solucioné haciéndome una “manga” casera con una toalla pequeña de color verde, que doblo haciendo como un cucurucho (más bien un embudo por el que sale el objetivo) y que uno a la malla y a la red con un par de imperdibles grandes. Esta manga casera deja sitio de sobra para meter la mano y disimula bastante bien el movimiento de los dedos. Ya sé que parece una chapuza pero a mí es lo que mejor me funciona.

Aquí vemos cómo queda todo una vez montado.

En esta imagen vemos por qué es tan importante que la tela sea opaca. Básicamente entre el bicho y nosotros no hay “nada” (una red y una malla), por lo que si la parte trasera se transparenta, nos verán perfectamente a contraluz.
Esto muestra cómo se ve desde dentro, a través de la malla y de la red:

Al principio sujetaba la red, la malla y la manga al objetivo con una goma elástica, pero esto hacía imposible girar la cámara para hacer fotos en formato vertical. Es mucho mejor unirlo con los imperdibles, que permiten girar el objetivo sin que se mueva todo.

Ventajas e Inconvenientes

Las ventajas de este hide son su poco peso, su coste, y que podemos hacerlo "a medida".

Los inconvenientes principales son que es poco eficaz si hay viento (se mueve y se deforma), que montarlo no es demasiado rápido por todo el tinglado de la malla, la red y la manga, y (en mi caso, que elegí mal la tela) que a veces se transparenta si tienes el sol a la espalda.

A cambio, la verdad es que a mí me sirve perfectamente.